En Chaparro nº 3 se podía ver cómo todo tenía un envidiable aspecto a nuevo y "recien pintado", como por ejemplo la escalera que podía verse justo al entrar a la derecha:
Las paredes estaban surcadas por multitud de flores, plantas y demás ornamentacion:
En el centro del patio había una gran mesa ataviada con un gran candelabro y una contundente bandeja con botellas de fino Alvear, creando una escena muy propia:
En este panorama se puede recorrer más detenidamente este patio:
Debido a que el día fue bastante lluvioso, las flores rociadas de agua tenían un toque especial y más fresco si cabe:
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